Hay cosas no tan normales
son así las estaciones,
mas las lluvias torrenciales
nos han traído inundaciones.
Esas lluvias tan copiosas
no se pueden controlar,
y así como van las cosas
hay que aprender a nadar.
Y sé nadador muy ducho,
duros retos nos vendrán,
“los de adelante corren mucho,
los de atrás se quedarán”.
Si estamos en este andar
en medio de convulsiones,
debemos investigar
cómo nadan los campeones.
Son duros tiempos señores,
no hagamos esfuerzos vanos,
deseo ver a mis lectores
en los puertos más lejanos.
Se encuentran rojos los focos,
el sol se va de repente,
es privilegio de pocos
nadar contra la corriente.
C.P EFRAÍN LECHUGA SANTILLÁN
1° de septiembre de 2025